El renovado interés por la gastronomía está generando un fenómeno curioso: la intención de los cocineros ya no es solo elaborar platos de calidad desde un punto de vista culinario, sino, también, sorprender y sobresaltar la experiencia perceptiva del comensal. Este libro explica cómo se las arregla el cerebro para entender los mensajes que los modernos cocineros envían a sus comensales, mejor dicho, a los cerebros de sus comensales. -Cuáles son los procesos que nos permiten disfrutar de una velada en compañía o emocionarnos al oler un risotto de flores y semillas? -Por qué siempre tengo un hueco para el postre?