-Desde que se expidió el Código de Comercio- que actualmente rige en Colombia, en 1971, me llamó poderosamente la atención este contrato de consignación por el hecho de haberlo conocido en su concepción romana de: aestimatum. En trece apartes se analizan los aspectos más sobresalientes del contrato, comparando la legislación colombiana con la de los otros escasos países que lo reglamentan; se propone una definición, se indican las características del mismo, sus diferencias con otras figuras jurídicas que se le asemejan, sus elementos esenciales particulares, las obligaciones que genera y su naturaleza, su prescripción y su terminación.- Tomado del Prefacio