El fútbol profesional es un deporte en el que diversos actores sociales ponen en escena sus relaciones sociales, aunque su sentido aparente sea la práctica deportiva; en forma simultánea, es el escenario donde se reproducen las relaciones y los conflictos originados en contextos sociales, económicos, políticos y culturales de mayor amplitud. El -barrismo- que tiene lugar en este contexto se ha transformado para muchos jóvenes en una práctica social cuyas representaciones constituyen un lenguaje particular que les permite manifestar tanto su identidad y sentido de pertenenecia, como sus conflictos y angustias sociales.