los relatos que componen este libro nacieron casi a la vez que pirineos, tristes montes. ambos comparten los escenarios, la intencionalidad y -casi- los protagonistas. los textos nacieron de una necesidad: la de dar voz a la gente que vivió en los pueblos, las aldeas y las casas solas de las montañas más ásperas de la cordillera. tipos corrientes, con los mismos deseos y los mismos temores que quienes viven en cualquier ciudad europea de la costa o en un poblado africano, con las mismas pasiones, con idénticos afectos y similares odios, con las mismas ganas de gozar e igual miedo ante el sufrimiento, la soledad y la muerte.