Simone Weil confesaba su deseo de ser considerada una poetisa antes que una filósofa. Su obra poética, sin embargo, se reduce a un puñado de poemas, reunidos en esta edición. Los primeros, poemas de juventud, son ante todo un ejercicio formal donde prima la intención estética sobre los contenidos, aunque ya revelen las inquietudes sociales y políticas de su autora, y muestren su tendencia a trasladar una realidad liberada de toda fantasía. Los poemas últimos, elaboran las ideas que más ocuparon a Simone Weil —necesidad, obediencia, voluntad, espera—, y representan una especie de epítome de su pensamiento.