Autor | HERRERO, MARDIA |
Resumen | «De repente, me pongo a correr, como si la mochila no me pesara. Y le voy diciendo adiós a cada roble, adiós a cada hórreo y a cada flecha amarilla. Y canto, otra vez canto, aquel tema de Medina Azahara que tanto le gusta a mi padre: "Necesito respirar, descubrir el aire fresco y decir cada mañana que soy libre como el viento." Porque ese verde, efectivamente, no es de supervivencia. Porque nada es de supervivencia aquí, todo nos trasciende. Y porque de repente me parece como si me estuvieran saliendo alas, la mochila se redujo, dejé de pesar, el cielo está lleno de nubes grises que me llaman.» |