En un mundo sacudido por crisis ecológicas, económicas y políticas, las fuerzas del autoritarismo y la reacción parecen tener la sartén por el mango. ¿Cómo nombrar, cartografiar y responder a esta situación? Basándose especialmente en las teorías radicales de la negritud y las teorías anticoloniales del fascismo, Toscano deja claros los límites de asociar el fascismo principalmente con el tipo de violencia política experimentada por los regímenes europeos del pasado. En lugar de buscar analogías en la historia, deberíamos ver el fascismo como un proceso mutable, anclado en el capitalismo racial y colonial, que antecede y sobrevive a su cristalización en la Italia de Mussolini y la Alemania de Hitler. Es una amenaza que sigue evolucionando en la actualidad.